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LOS 7 CHAKRAS PRINCIPALES


Los Chakras son centros de energía. Funcionan como receptores y transformadores de las diversas formas del prana o energía vital. 


Cada chakra está relacionado con uno de los elementos: tierra, agua, aire y éter de la mente. La mente es un instrumento de la conciencia. Estos elementos son los estados de la materia y no elementos tal como lo entendemos en la química moderna. Ellos son equivalentes a los términos: sólidos, líquidos, gaseosos o de fuego, aire, y etérico – que son algo análogos a lo físico, astral y mental. 

La palabra Chakra es sánscrito y significa “rueda”,  y se podría traducir como vórtice o platillo en forma de depresiones que existe en la superficie del cuerpo etérico humano.

Hay aproximadamente 88000 chakras en el cuerpo humano. La mayoría son muy pequeños y desempeñan un papel menor en su sistema energético. Sin embargo, hay aproximadamente 40 chakras secundarios que son de importancia, que se encuentran en el bazo, la parte de atrás de su cuello, las palmas de sus manos o las plantas de sus pies. 

Los 7 Chakras Principales 

Los siete chakras principales están situados a lo largo de un eje vertical central de nuestra columna vertebral y abierto hacia la parte delantera del cuerpo como una flor. Estos círculos son centros de energía en constante movimiento. 


El canal que se extiende a lo largo de toda la columna vertebral, se denomina el chakra sushumna (el más importante canal de energía) que sube por la columna vertebral a la parte superior de la cabeza. 

Primer Chakra – Muladhará


El primer chakra se llama el chakra raíz. Su nombre es Muladhará y su color es el rojo. Se representa como un loto de 4 pétalos. Está situado entre el ano y los genitales y está conectado con el coxis. 

Este chakra se abre hacia abajo. Su elemento es la Tierra y se relaciona con todas las cosas sólidas y terrestres, como el cuerpo, la salud, la supervivencia, la existencia material y monetaria, y nuestra capacidad para atender y manifestar nuestras necesidades. Es la necesidad corporal de mantenernos vivos y en buen estado de salud, y la necesidad mental de admitir la limitación y la disciplina esenciales para su manifestación. Se vincula a todas las partes sólidas del organismo, especialmente los huesos, el intestino grueso (por el que transita sustancia sólida) y la masa muscular del cuerpo en su conjunto. Las glándulas asociadas son las suprarrenales. 

Características del Chakra: 

Demasiado abierto: es cuando el chakra gira a una velocidad excesiva. La persona es desafiante, demasiado materialista, centrado en sí mismo y se compromete con absurdas hazañas físicas. 

Bloqueado: es cuando el chakra no gira o lo hace con demasiada lentitud. La persona siente necesidades emocionales, baja autoestima, conducta autodestructiva y es muy temerosa. 

Equilibrado: es cuando el chakra mantiene el equilibrio y gira a la velocidad correcta. La persona demuestra dominio de uno mismo, gran energía física, bien enraizado y es saludable. 

Segundo Chakra – Svadhisthana 




El segundo chakra se llama Chakra Esplénico o Fundamental. Su nombre es Svadhisthana que significa “Morada Propia” y su color es el Naranja. Se representa como un loto de 6 pétalos. Su elemento es el Agua y según los libros en Sánscrito dicen que esta localizado por debajo del ombligo. 

Se considera este chakra como centro de la sexualidad, así como de las emociones, la sensación, el placer, el movimiento y el instinto de protección. Los órganos relacionados son los genitales, los riñones, la vejiga y el sistema circulatorio. Las glándulas relacionadas son los ovarios y los testículos. 

Este chakra establece los límites (lo que es suficiente) de nuestros apetitos emocionales y físicos. Su energía crea cambios que nos hacen sentir irritables, sensuales, llorosos o agresivos. Tiene que ver con los deseos. Puede querer cada vez menos o cada vez más. Ambos son aspectos de la misma falta de equilibrio que se basa en una sensación de carencia y en una falta de capacidad de conocer la verdadera medida de las cosas, situaciones o personas. Un sentido real de bienestar, de placer y de abundancia es conocer realmente cuando, qué y quién “es suficiente”. La abundancia no se refiere a cosas materiales, sino a su actitud en relación con lo que se tiene y a como se siente en relación con las cosas. Cuando sentimos que lo que tenemos y lo que somos es suficiente, el chakra funciona de un modo óptimo, y estamos tranquilos y complacidos. 

De acuerdo a como fluye la energía en este chakra tendremos mejor o peor relación con nuestra sexualidad y con nuestra capacidad de disfrutar del placer. Este centro trata de lo que sentimos, tanto a nivel físico como emocional. Atender a nuestra necesidad de expresión sexual es otra forma de admitir el placer en nuestra vida. Nuestra capacidad para aceptar el placer depende de nuestras actitudes. Es sano aceptar que somos seres sexuales y que tenemos cuerpos físicos que responden al placer. La forma en que expresamos esta nueva conciencia en las relaciones depende de la imagen que tenemos de nosotros mismos, de la conciencia de nuestro cuerpo y de nuestro nivel de sensibilidad emocional. Tenemos muchas ocasiones para aprovechar esta energía. Podemos utilizarla para que los demás aprecien nuestro atractivo. Podemos sublimar esa energía a través de diversas actividades o podemos compartirla con alguien que amamos y que nos valora. También podemos mantenerla oculta y pretender que no existe. 

Características del chakra: 

Demasiado abierto: es cuando el chakra gira a una velocidad excesiva. Produce personas emocionalmente desequilibradas, fantasiosas, manipuladoras y adictas al sexo. 

Bloqueado: es cuando el chakra no gira o lo hace muy lentamente. Son personas que son excesivamente sensibles, duras consigo mismas, se sienten culpables sin razón alguna, sufren de frigidez o impotencia. 

Equilibrado: es cuando el chakra gira a la velocidad vibratoria correcta. Estas personas son confiadas, expresivas, en sintonía con sus sentimientos y creativas. 

Tercer Chakra – Manipura


El tercer chakra esta ubicado en el plexo solar y se llama Manipura que significa “Gema Brillante”, su color es el Amarillo y se representa como un loto de 10 Pétalos. Se relaciona con el elemento Fuego. Se ubica exactamente a unos dos dedos por encima del ombligo y está conectado directamente a nuestro cuerpo astral o emocional. A través del chakra plexo solar absorbemos la energía solar que alimenta nuestro cuerpo etérico, que a su vez dinamiza y mantiene nuestro cuerpo físico. Aquí es donde nuestra parte emocional irradia energía, en particular a nuestros “sentimientos”. 
A nivel físico el aparato digestivo es parte importante de dicho sistema. Los órganos asociados son los del aparato digestivo y los músculos. Las glándulas son el páncreas y las suprarrenales. El plexo solar es una fuente brillante de poder para las personas que conocen su propio valor y que tienen un sentido real de su identidad. Un plexo solar fuerte y flexible proviene del hecho de aceptar los desafíos de la vida. El chakra del plexo solar es la sede de nuestros instintos. En él se digieren las experiencias de la vida . Aquí bloqueamos nuestras emociones como la cólera, la agresividad , el disgusto, el horror, el temor y también el miedo al fracaso y a la muerte. Aquí es donde experimentamos la ansiedad y donde nuestro espíritu se siente agobiado. 

Características del Chakra: 

Demasiado abierto: es cuando el chakra gira a una velocidad excesiva. Produce cólera, excesivo control y adicción al trabajo. Estas personas expresan juicios sobre los demás y se muestran superiores. 

Bloqueado: es cuando el chakra no gira o lo hace muy lentamente. Produce personas que se preocupan por lo que los demás piensan, tienen miedo de estar solas, son inseguras y necesitan que las confirmen constantemente. 

Equilibrado: es cuando el chakra gira a la velocidad vibratoria correcta. Son personas que se respetan a sí mismas, a los demás y evitan hacer juicios de valor. 

Cuarto Chakra – Anahata

El cuarto chakra está ubicado en el corazón, se llama Anahata, que significa “Intacto”, su color es el Verde y se representa como un loto de 12 Pétalos. Guarda relación con el elemento aire. Es el centro de todo nuestro sistema de chakras. Se encuentra en el centro y próximo a la cavidad del corazón y conecta los tres a los centros superior, mental y espiritual. La misión del cuarto chakra consiste en integrar y equilibrar los diversos aspectos de nuestro ser. El chakra cardíaco es el centro del amor, es en el corazón donde espíritu y materia realizan su fusión. El amor que experimentamos en el plano del chakra corazón es claramente distinto del amor-pasión-sexo que corresponde al segundo chakra. 

El amor es el sentimiento profundo de afinidad espiritual. Es la conexión con una profunda verdad fundamental común a toda vida y que todos compartimos. Es el amor quien nos mantiene en relación. Es el fundamento de lo que somos. El nivel de conciencia del cuarto chakra percibe el mundo como una intrincada red de relaciones, consolidada por la fuerza del amor y su equilibrio. Hay que buscar el equilibrio entre el amor y la individualidad, lo que significa sacrificar un poco de ambas cosas. 

Características del chakra: 

Demasiado abierto: Son personas posesivas, que aman condicionalmente y se retienen emocionalmente “como castigo”. Son abiertamente dramáticas. 

Bloqueado: Produce personas con miedo al rechazo, que aman en exceso, se sienten indignas de recibir amor y sienten autoconmiseración. 

Equilibrado: es cuando el chakra gira a la velocidad vibratoria correcta. Son personas compasivas, que aman incondicionalmente, que alimentan a los demás, y que desean tener una experiencia espiritual al hacer el amor. 

Quinto Chakra – Vishuddha

El quinto chakra se encuentra en la garganta, se llama Vishuddha, que significa “Purificación”, su color es el Azul y se representa como un Loto de 16 pétalos. Guarda relación con el elemento Éter.  Se encuentra entre la depresión del cuello y la laringe, a partir de la vértebra cervical. Comienza en la vértebra cervical y se abre hacia la parte delantera. También esta conectado a un chakra secundario pequeño, que tiene su sede en el cuello y se abre a la espalda, pero dado que los dos chakras están tan estrechamente relacionados, se ha integrado en uno solo. A pesar de que tiene mucho de azul sobre él, también es de color plateado. El quinto chakra es el centro del sonido, la vibración y la autoexpresión. Es el dominio de la conciencia que controla, crea, transmite y recibe las comunicaciones, tanto en nuestro fuero interno como en las relaciones con los demás. Es el centro de la creatividad dinámica, la que sintetiza las ideas antiguas para dar lugar a algo nuevo. Entre sus atributos figuran: el escuchar, el hablar, el escribir, el canto, la telepatía y todas las artes, en especial las que tienen que ver con el sonido y la palabra. Este chakra ocupa un lugar crucial como puerta entre la mente y el cuerpo. A medida que ascendemos a los chakras superiores, nos alejamos de lo físico. La comunicación es el primer nivel en que trascendemos lo físico. Es un acto de conexión. Es uno de los principios unificadores de los chakras superiores. Es la transición de una dimensión a otra. 

Este chakra es el puente entre el amor que emana del corazón y la sabiduría del intelecto. Es el vehículo de nuestros sentimientos y de los pensamientos que utilizamos para expresarlos. Las cualidades del chakra de la garganta son: la verdad, la comunicación, la fuerza de voluntad, la creatividad y la integridad. Este centro fomenta la expresión emocional y espiritual. A través de él expresamos el amor, la alegría, el miedo y nuestras aspiraciones espirituales superiores. 

Características del chakra: 

Demasiado abierto: Produce personas que hablan en exceso, son dogmáticas, santurronas y arrogantes. 

Bloqueado: Produce personas que evitan la autoexpresión, que no tienen confianza y que mantienen opiniones incoherentes. 

Equilibrado: Produce personas que son buenas comunicadoras, satisfechas, a quienes les es fácil meditar y son artísticamente inspiradas. 

Sexto Chakra – Agña


El Sexto chakra es llamado el tercer ojo, su nombre es Agña, que significa “Percibir”, “Conocer”, y su color es el Rosa o el Añil. Se representa como un Loto de 2 pétalos. El percibir y conocer nos da una idea de la doble naturaleza de este centro: recibir imágenes por las percepción, pero también formar imágenes a través de las cuales nos adueñamos de la realidad, en el proceso llamado comúnmente de visualización creativa. Se visualiza como color celeste-añil. Se localiza en un punto ligeramente por encima del entrecejo. Los órganos asociados son los ojos y la glándula es la pineal. El elemento correspondiente es la luz. Está asociado, pero no identificado con el tercer ojo, el órgano etérico de la percepción parapsíquica que flota entre los ojos del cuerpo físico. Podríamos considerar al tercer ojo como el instrumento psíquico del sexto chakra, al igual que los ojos físicos son instrumento de la percepción para el cerebro. 

Conocer que quieren decir las cosas es una de las funciones de este chakra. Ayuda a discernir que es lo positivo que han aportado ciertas personas o lugares. Revela lo que ha sido útil y lo que ha creado lucha, falta de armonía y sufrimiento. Enseña la verdadera naturaleza de la realidad. Si estamos felices y abiertos a las cosas buenas de la vida, somos capaces de crear más cosas buenas para disfrutar de ellas. Si estamos convencidos de que dichas cosas llegarán a nuestra vida, generalmente lo hacen. Por el contrario, si somos negativos, esépticos y estamos asustados, las experiencias en la vida estarán teñidas de esas vivencias. El chakra se abre cuando asumimos mayores niveles de responsabilidad en la vida y cuando se conquista la calidad de vida que se desea. El crecimiento interior y la madurez están profundamente conectados con este chakra. Es el lugar donde somos capaces de mirar en lo profundo de la propia naturaleza para evaluar las elecciones. Cuando dudamos de nosotros mismos o estamos en conflicto con el conocimiento interior y las acciones externas, el centro se cierra, la capacidad de juicio resulta afectada y se toman decisiones basadas en razones equivocadas. Los arquetipos del chakra sexto son como la representación misma de los dos hemisferios cerebrales. 

Por un lado , la parte de la razón que se atiene a lo que dicta la lógica y, por el otro, el lado creativo que nos impulsa a adoptar posturas o acciones totalmente nuevas que permiten ir más allá.  Una vez despiertos a la necesidad de escuchar, desarrollando el chakra de la garganta, los psíquicos escuchan en su interior. Reconocen que la sabiduría del chakra del tercer ojo es como un susurro que no puede ser oído a menos que se aquiete el ruido de la vida cotidiana. Por eso se reconoce la necesidad de la meditación y la contemplación, con el objeto de que brillen su creatividad e intuición. Esta forma de pensar esta dirigida hacia el interior y se puede evaluar mediante una escala objetiva para reflejar el crecimiento y la sanación. Este modo de pensar no es analítico, sino más bien simbólico e imaginable. Tras haber afinado las habilidades, los psíquicos suelen convertirse en artistas excepcionales, en sanadores y terapeutas. Conocen la diferencia entre teoría y práctica: que el individuo realmente dotado no es aquel que vive “como los libros”, sino quien confía que su instinto le proporciona percepciones únicas. 

El arquetipo disfuncional es el racionalista, que permite el predominio del hemisferio cerebral izquierdo, usualmente por el miedo y la inseguridad que siente ante la idea de desmantelar el mundo seguro en el que ha crecido y se ha limitado. En realidad, los racionalistas no son simplemente personas que adoptan una idea “científica” con respecto a todo. Este grupo también incluye a los controladores y a los perfeccionistas, los que no pueden aceptar los fallos humanos de los demás y son igualmente duros consigo mismos. Temerosos de conocer cosas que prefieren ignorar, no están dispuestos a mirar en su interior. Hay quienes pasan de una experiencia a otra sin detenerse a reflexionar y nunca accederán a la sabiduría. Repetirán las mismas equivocaciones una y otra vez sin comprender lo que les ha sucedido. 

La resistencia al cambio hace que las personas desgasten su energía vital, mermen su voluntad y envejezcan y se agoten antes de tiempo. No saben apartarse de las cosas que les quitan su energía. No han desarrollado la discriminación, ni la habilidad para saber si algo es bueno o malo para ellas. Al haber elegido no confiar en sus sentimientos, sus intuiciones y sabiduría interior, quizás porque fueron ridiculizados en su infancia, el racionalista se obliga a mantener una serie de normas que cada vez le aíslan y limitan más. 

Características del chakra: 

Demasiado abierto: Son personas muy lógicas, dogmáticas, estructuradas, e interesadas. 

Bloqueado: Son personas indisciplinadas, que temen al éxito, con tendencia a la ezquizofrenia y con miras muy bajas. 

Equilibrado: Son personas carismáticas, muy intuitivas, no están apegadas a las cosas materiales, pueden experimentar fenómenos inusuales. 

Séptimo Chakra – Sahasrara




El séptimo chakra, es el chakra corona, se llama Sahasrara que significa “Multiplicado por mil” y es conocido como el Loto de los 1000 Pétalos y su color es el Violeta o el Blanco. Está vinculado elementalmente con la energía y el pensamiento cósmico. Se localiza en la membrana del cráneo en la coronilla, en la parte superior de la cabeza. El séptimo chakra se vincula a la mente y especialmente la lucidez. La mente va asimilando la existencia, confiriéndole sentido, y construyendo el sistema de creencias. Estos son los programas maestros a partir de los cuales edificamos la realidad. Por eso, este chakra es el chakra maestro y se relaciona con la glándula maestra del sistema endócrino, la pituitaria. 

Fisiológicamente, guarda correspondencia con el cerebro y más especialmente con la parte superior o córtex cerebral. 

Funciona como una antena, un receptor de la energía divina que llega a nosotros en la forma de inspiración, guía y protección. Nos pone en contacto con lo eterno, lo que no muere, la parte permanente del alma. La sabiduría de cada vida se acumula en este centro y representa la trascendencia total de lo que es terrenal, fugaz y transitorio. Es la conciencia de uno mismo y del universo al mismo tiempo. El chakra corona representa un estado iluminado de conciencia que en hindi se conoce como Samadi. Mientras nos movemos en la incertidumbre de la vida con este chakra abierto y funcionando correctamente, advertimos y experimentamos la presencia de la guía divina en todo lo que hacemos. Nos inspira mientras recorremos el camino que hemos elegido. Se abre tardíamente en la vida, una vez que se ha aprendido la naturaleza espiritual de la existencia y a ser capaces de afrontar la responsabilidad de servir al mundo y al planeta. Si se activa demasiado pronto, es posible que alguna otra parte del sistema energético no esté funcionando correctamente y acaso experimente locura temporal, confusión e indecisión. 

Cuando se desarrolla por sus propios medios, la persona está preparada para asimilar las verdades espirituales y vive libre del ego y receptiva a la voluntad de Dios. Las personas que siguen un camino espiritual y que no están afiliadas a una religión pueden abrir el chakra viviendo la vida según sus verdades superiores. La serenidad es un aspecto importante de este chakra. Es más profunda que la calma y nos ofrece paz mental, nos coloca en el presente y de este modo cualquier cosa que hagamos estará bien: no hay resistencia ni separación. No tiene importancia donde nos encontremos ni que estemos haciendo, estamos viviendo el presente. La verdadera serenidad proviene de la aceptación de los deseos, de las emociones y de la naturaleza. Significa sentirnos cómodos con lo que somos. Este es el chakra que mantiene la comodidad necesaria para la estabilidad. 

El arquetipo disfuncional no solo es aplicable a un místico que está sentado en la cima de una montaña meditando sobre la vida. Ese estado lo pueden lograr igualmente aquellos cuyo triunfo es tan grande como el del egocéntrico. En equilibrio puede concentrarse en objetivos específicos y alcanzables, pero sabe que hay infinitas posibilidades, más de las que la mente humana puede imaginar, a través de las cuales estos objetivos podrían realizarse. Por tanto, están abiertos y dispuestos a aceptar lo inesperado, lo extraño, las coincidencias. El equilibrio nos lleva a aceptar lo poco que uno sabe, por lo que se confía en que la conexión con el ser superior le proporcionará siempre el camino o la respuesta adecuada. Estos individuos irradian una calma interior que procede de una aceptación total de quienes son realmente, sin importarles lo que son. No son seres humanos intentando ser espirituales, sino seres espirituales aprendiendo las lecciones emocionales vitales al llevar temporalmente el mando de lo espiritual. Las personas que viven de acuerdo con la conciencia espiritual superior no suelen poner sus energías en las luchas por la vida. Se dedican a enseñar, a guiar y a inspirar a los demás para que encuentren su propia magia y cultiven sus propios dones. 

El arquetipo disfuncional es el egocéntrico, que es arrogante y centrado en sí mismo. Su expresión común es “yo creo mi propia suerte”. Por su concentración total en el mundo material y en la ilusión de que lo controla, el egocéntrico no tiene conciencia de lo divino, ni relación alguna con ello. Estos adictos del control se consideran totalmente responsables de todos los beneficios que consiguen en la vida. Ciertamente, su bienestar psicológico depende en gran parte del éxito material, pues los egocéntricos se identifican exclusivamente con lo que hacen, no con quienes son. El problema es que están tan atareados concentrándose en su destino que se olvidan de disfrutar del viaje, y su tendencia a la adicción al trabajo a menudo los deja solos y sin gratificación a los niveles más profundos. 

Demasiado abierto: Son personas psicóticas o maníaco depresiva, con expresión sexual confusa, frustradas, con la sensación de que el poder no se ha realizado. 

Bloqueado: Son personas constantemente agotadas, que no pueden tomar decisiones y no tienen sentimientos de pertenencia. 

Equilibrado: Son personas con personalidad magnética, logran “milagros” en la vida, son trascendentes y están en paz con el ser. 

Calibrarlos, activarlos y equilibrarlos transformará nuestra salud, aclarará la mente, equilibrará sentimientos, liberará patrones energéticos de Emociones que se adhieren a órganos, etc.